En fechas muy recientes (mes de octubre) el Consejo de Ministros aprobó el Reglamento del Ruido, que establece una serie de objetivos de calidad acústica y limitaciones por zonas y horarios. Se complementa así la Ley del Ruido (2003) y un Real Decreto del 2005.
Las comunidades autónomas clasificarán las zonas (industriales, recreativas, residenciales…) y se arbitrarán medidas de seguimiento para verificar que se cumple la normativa. Se realizarán mapas de ruido como método de evaluación y gestión de la contaminación acústica. Asimismo, se creará un Sistema Básico de Información de la Contaminación Acústica (SICA); la ciudadanía podrá tener acceso a una información sobre el ruido de forma clara.
El Ministerio de la Vivienda también presentó otro documento para proteger contra el ruido: los nuevos edificios deberán hasta triplicar los niveles de aislamiento, afectando a todos los elementos constructivos y no sólo a los de separación como hasta ahora.
Han surgido sectores que critican el nuevo reglamento, al que consideran insuficiente. Como muestra podéis ver las de la Plataforma Estatal de Asociaciones contra el Ruido y las Actividades Molestas.
(Fuente: Revista Consumer)