La ampliación de El Cabril que anunciábamos cuando finalizaba el pasado curso ha comenzado a ser utilizada (el pasado día 1) con la llamada celda 29, primera de las cuatro previstas y que albergará residuos radiactivos de muy baja actividad, provenientes de incidentes en acerías -como los sucedidos en Acerinox (Los Barrios, 1998) o Siderúrgica Sevillana (Alcalá de Guadaíra, 2001)- o del desmantelamiento de centrales nucleares.
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