Conocemos ya el fenómeno del afloramiento, que produce ricos caladeros de pesca en algunas zonas costeras, debido al ascenso de los nutrientes de zonas frías profundas. Pero no siempre un exceso de nutrientes va a ser positivo. Cuando éstos provienen de la contaminación humana (fertilizantes y detergentes sobre todo), tienen un efecto perjudicial a medio plazo y largo plazo; se llama eutrofización y se suele estudiar al tratar la contaminación de las aguas continentales. El fenómeno llegó hace tiempo también a los mares.